Bueeeeenas!
Recién-recién empiezo con todo el tema de probarme vestidos para mi casamiento. Estoy en el proceso de descubrir que telas, que detalles, que estilos me sientan y me gustan. Y, al mismo tiempo, estoy con el proceso de descubrir la experiencia de ir a probarse vestidos de novia y descubrir cosas que no me esperaba.
Entiéndase:
- el lidiar con estar semidesnuda frente a desconocidas
- Percibir con sumo desagrado que el espejo que te ponen atrás para que veas la cola te deja en evidencia, en los momentos de semidesnudez, esa celulitis que venias ignorando como la mejor (pero bue, que le vamos a hacer. yo pienso seguir comiéndome las facturas que traigan en el laburo)
- morirse de calor y no saber si es por la sensación térmica actual de Buenos Aires o culpa del vestido
- darle un rodillazo accidentalmente en la cabeza a la muchacha que te ayuda a ponerte el vestido (Julieta, te juro que fue sin querer!) y sentirte de lo peooor
Alguna otra novia tiene para contar una experiencia/anécdota inesperada graciosa/interesante/vergonzosa del proceso de probarse vestidos?
(Principalmente necesito consuelo y saber si soy la única torpe que lesionó a otra persona en la prueba de vestido)