
Llegamos a Vicopisano (un pequeño pueblo cerca de Pisa) un viernes 25 de julio. Marghe nos reservo una habitación en un hermoso hotel y ahí nos encontramos con una amiga española en común, Clara, y su novio....fueron días de hermosos reencuentros!
Al día siguiente, era el gran día! Comenzó todo tipo 5 de la tarde.Nos fuimos los 4, en el auto que Clara había alquilado, a la parroquia que parecia ser del siglo XVIII o antes!!! Obvio que todo el pueblo sabía de la boda de Marghe y Tomasso! Jaja...había mucha gente afuera de la parroquia esperando! Llegó el novio, y entró a la parroquia, pero los invitados quedamos afuera hasta que llegó Marghe con su papá y ahí recién entramos todos. Primera diferenciación con las bodas argentinas. Terminada la ceremonia, se nos entrego un mapa con un moño enorme de regalo...no entendíamos para qué era! Jaja...como el lugar de la fiesta está como a una hora de distancia, todos los autos llevaban ese moño así nos podíamos Seguir tipo caravana y ninguno perderse

Villa Grabau fue el lugar elegido para la fiesta....un lugar de ensueño! Hubo una recepción con muchaaa comida y con mucho Spritz (típica bebida italiana) en la parte exterior de esa enorme finca. Luego de las fotos, nos guiaron al lugar de la cena decorado magníficamente. La comida exquisita...lo raro?no hubo baile! (Con clara esperábamos eso porque es común tanto para nosotros como para los españoles), todo fue cena y evidentemente es típico de ellos, porque fuimos los únicos sorprendidos.
De todos, con diferencias o no, fue un hermoso día y una experiencia única! Espero poder decir lo mismo de mi boda! Jeje...buen finde para todos*









